102 sinfonías, cuartetos, trios, sonatas para piano, óperas, oratorios... Parece increíble la fertilidad de este hombre sencillo que no ha pasado a la Historia como el genial Beethoven, ni como Mozart, ni como J.S. Bach... Haydn es el hombre que se independiza, el trabajador que persigue la inspiración, el equilibrio, la armonía... Y lo consigue. Mozart lo veneró, lo tuvo por maestro y le dedicó sus mejores cuartetos... Su longevidad fue un regalo para nosotros, herederos universales de su arte.
A menudo pienso en cómo se puede agradecer lo mucho que nos legaron músicos maravillosos como Joseph Haydn, y la cantidad de jornales que ha dado a tantos y tantos músicos que vienen interpretando sus obras desde hace casi dos siglos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario