Me dijeron de él: Tiene más música en la cabeza que en la garganta. Supe lo que me estaban diciendo como siempre he sabido que la música está en la cabeza, y en el corazón. Como todo.
David Palomar es joven, de la Viña, flamenco a carta cabal, como son los flamencos de Cádiz, y graba lo que a él le gusta.
Ricardo Pachón le dijo que yo le había grabado un disco con Paco Cepero a Donday. Era el primer disco, como Dios manda, que le habían hecho a Santiago, uno de los cantaores más puros del Cádiz eterno. Me llamó y quedamos en Cádiz.
Estuvimos en la Viña, en Ca Felipe, con el cantaor y Cepero. Fue una mañana inolvidable. Nos hizo fotos y Donday le cantó por soleá, como él sabía hacerlo. Fue muy generoso con la producción, con el cantaor. Gracias a Mario Pacheco el Flamenco cuenta con una grabación inolvidable de dos artistas excepcionales: Paco Cepero y Santiago Donday.
Hoy he sabido que ha muerto, a los 60 años. Estoy tan triste que no tengo ganas de respirar. La España de la componenda y el desastre apenas sabe lo que la Cultura española ha perdido con esta muerte.
Flamenco, Tango, Fado... Y vuelta a empezar. Digo con nuevas ideas. Y sobre el Flamenco que ahora hay, que no es el mismo de cuando entonces, aunque siga Paco de Lucía, José Mercé, Manolo Sanlúcar y la Filarmónica del barrio de Santiago. Flamenco, Flamenco se llama. La magia de Storaro, el talento de Saura y esta condensación de Arte que se llama Flamenco, que todo lo que toca lo hace brillar.
Los ojos se me han salido de las órbitas viendo el vuelo de las faldas, la inteligencia de María, la Niña de Pastori, y Estrella Morente, Israel Galván, la Yerbabuena, Miguel Poveda atreviéndose con lo que Tomasa Guerrero puso en lo más alto del listón del duende... Un elenco inolvidable, una apuesta arriesgada pero sobre el colchón de luz de Storaro, la sabia mano del maestro Saura.
Hay que verla en los cines, luego nos conformamos con los dvds. En los cines uno se queda como aplastado por toda la blandura, la magia, el encanto del Flamenco.
La improvisada autosatisfacción audiovisual de ayer me hizo pensar en Extremadura, y Murcia. También en Madrid y Barcelona. Rápidamente estuve poniendo en un imaginario mapa de la Andalucía actual (en otro tiempo llegaba hasta Barbastro) señales luminosas en cada localidad en donde nació o vivió un flamenco. Nueva York de noche desde el satélite. Habría que administrar con mucha prudencia el título de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad que nos hemos traído de Nairobi. Los españoles, digo. Por esto que estaba diciendo: por Extremadura, que tiene un flamenco excepcional; por Cartagena y Murcia. Por Madrid y Barcelona. Es que el Flamenco es como un río con muchoas afluentes que toman las aguas de muchos manantiales, de muchos territorios. Y por eso no es de nadie en exclusiva, sino de todos. Que es lo que es España, un territorio de todos. Inmediatamente pensé en la memoria de dos siglos y en los registros de algo más de 100 años. Y en los mitos que modernamente ha generado el Flamenco. Digo en cómo cantaba Enrique el Mellizo, o el Planeta, el Fillo y Tío Luis el de la Juliana, que dicen que “creó” las tonás en el siglo XVIII, en Jerez de la Frontera, por cierto. Que algunos refieren como si los hubieran estado oyendo toda la vida de Dios.
Antes de tener el Título el Flamenco era ya un patrimonio inmaterial. Verdaderamente, siendo tan polimorfo, raro es que no haya estado subyugando desde siempre. Sobre las tablas de un escenario sobre todo. Digo los brazos levantados de una bailaora, o el taconeo de un bailaor lorquiano, como un mimbre su esbeltez, como una acelga. Digo la guitarra, que siendo un solo instrumento algunas veces suena como una orquesta filarmónica. Digo el cantaor que se rompe el alma en un tercio de la soleá o se ríe de su suerte por bulerías.
Han sido más de dos siglos destilando esta belleza para llegar aquí, a Nairobi, a una UNESCO que se rinde finalmente y declara que es verdad, que el ¨Flamenco es un Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. La alegría de la flamenquería actual, tan sonriente en la Agencia de Sevilla o el Centro Andaluz de Jerez, hereda las amarguras de los flamencos perseguidos, de los gitanos llevados a galeras o a la construcción de La Carraca. O a las minas de azogue. Por la sangre llevan todo, por la sangre nos viene el dolor desgarrado de una seguiriya o la explosiva exaltación de la vida. Por alegrias, por fandangos, por la ida y vuelta de los cantes que llegaron a Cádiz desde la España del otro hemisferio.
La espuela no se clavará en el mundo sino en la propia tierra en donde crece esta luminaria, esa luz tan bella que nos ciega. Digo que ahora habrá que empezar a dar ejemplo.
Mi buen amigo el Dr. Guillermo Boto, que sabe de toros, de flamenco y de Cádiz casi tanto como de Ginecología, que es su especialidad, me trae, con su amabilidad proverbial, esta foto con Mariana Cornejo, que es la gracia y el compás de Cádiz, la heredera de los secretos de la alegría, y con su amiga del alma Pepi la de Ignacio, cantaora, mujer buena, de mucho arte. Con ellas hay que sonreír, son de lo mejor que hay. ..
Fue en el Centro Municipal de Flamenco "La Merced", el invierno pasado.
"La vie n'a laissé à Billie Holiday ni le temps d'être petite ni l'occasion de grandir. Á dix ans, le viol l'a privée d'enfance. Trois ans plus tard, par la prostitution, elle sortit de l'adolescence avant d'y être entrée. La pauvreté lui volerait bientôt sa jeunesse, en l'obligeant à se regarder dans le miroir aux alouettes -à épouser cette "vie d'artiste" qui est l'une des plus sûres façons de vivre à coté de sa vie. Deux luxes lui furent toujours refusés: celui de l'innocence et celui de la maturité. D'abord le rempart d'une précieuse ignorance, puis ce recours à la lucidité qui ravage nos rêves en nous gardant de la désillusion. "
Es sábado. Me pongo a escribir. Ayer me trajo Josemari el cofre de Kind of Webster. Casi había perdido la esperanza. Lo reflejo aquí, por donde pasa el recuerdo de la vida. No diré que me entusiasma, como por ejemplo El Torta por alegrías de Camarón y La Perla, pero pone en mi alma una paz especial, me eleva de esta condición doliente, humana.
La tristeza no es triste ni la melancolía una enfermedad con Ben Webster...
¿Cómo se agradecen estos regalos, digo esta música maravillosa?
Como un niño. Habría que matizar la comparación pero Carlos Edmundo, en Cádiz, tenía esos visos. Ingenuidad, bondad, alegría. En Cádiz era completamente feliz. Siempre con sus amigos del alma Jesús Fernández Palacios y Pili, y con todos los escritores y poetas gaditanos. Un hombre feliz porque volvía al paraíso de su infancia en la ciudad de la alegría y de la gracia y de la libertad.
Había llegado la onda mucho antes de que se confirmara la noticia. Digo que Carlos Edmundo de Ory estaba muy enfermo, se estaba terminando. ¡Tan lejos de la blandura de Cádiz!, suspiré. De este sol de noviembre, del mar, de los recuerdos por las calles de Trimilenaria. Y también pensé en Jesús Fernández Palacios, más que amigo, si eso fuera posible. Porque lo albergó siempre en su casa, le publicó, lo trajo y lo llevó. Y no se cansó nunca de ponderar sus prosas, que era tan buenas como sus versos, o mejores.
Mi sensación es que pese a su longevidad su vida fue muy corta, por su incansable curiosidad, su infinita capacidad para la sorpresa, la indagación, la duda. Y la infancia casi infinita que mantuvo, no mintiendo -como dicen que hacen los viejos y los niños- y viviendo la vida como un descubrimiento de cada instante.
Muere un poeta y la humanidad se resiente, se ha dicho. Cádiz se ha empobrecido con esta muerte, además de resentirse en lo más hondo. Porque nadie como los poetas para elevar del suelo la humanidad sufriente, la humanidad insomne.
En Francia ha sido el golpe triste de la campana pero el sonido ha sonado por las calles de este Cádiz tranquilo con pancartas y gritos que piden trabajo, y justicia. El pan nuestro de cada día.
Descanse en paz el niño anciano, el poeta grande, original y sabio. El bueno de Carlos Edmundo de Ory. Gaditano asombrado, hombre perplejo, amoroso amigo. Dios lo ponga en el cielo de los poetas, que es el cielo más celeste de todos.
Entre La ciudad y los perros y El sueño del celta, en América Latina ha habido un abismo, y si no, un gran avance en la libertad. Salvo en Cuba, que parece la dictadura perfecta, y eterna, la gerontocracia inamovible. Las formas de la libertad son muy parecidas en todas las regiones del mundo: elecciones libres que garanticen la alternancia en el poder y leyes “justas y sabias”, que se decía en las Cortes de Cádiz, esto es, libertad de prensa, control a los poderes, sean políticos, económicos o de cualquier tipo.
Quien esperara otro discurso del Premio Nobel de Literatura de 2010 ayer en el Teatro de las Cortes de San Fernando, no lo conocía. Yo le he oído ese discurso -privadamente, en público- desde hace más de 25 años. No ha variado. Fue invitado a decirlo otra vez, con motivo de la recepción del Premio en Defensa de la Libertad de Expresión, y no se cortó un pelo. Pero ocurre que los años, la experiencia y la mayor sabiduría, lo han investido de un halo complejo y rico de matices.
La Libertad de Expresión no está a salvo ni en los países en donde se dan las libertades formales y, definitivamente, ha retrocedido en Venezuela, Bolivia y Ecuador (la tierra de Bolívar y Miranda, añadió Vargas Llosa). Y en Argentina, Brasil y México. La libertad de expresión retrocede por la presión sobre los editores y sobre los periodistas. En algunos países bajo unas premisas ideológicas y en otros, como en México, por la extorsión y el asesinato por los sicarios de los carteles de la droga.
Ayer se cumplieron dos siglos del Decreto IX de las Cortes de Cádiz reunidas en el viejo teatro de comedias de la Real Isla de León. Todos los cuerpos y personas particulares, de cualquier condición y estado que sean, tienen libertad de escribir, imprimir y publicar sus ideas políticas sin necesidad de licencia, revisión o aprobación alguna… Como tantas y tantas cosas de esta Constitución maravillosa, y de lo que la rodeó, nos admira la construcción de la libertad bajo el asedio y sitio de los napoleónicos. Los asedios hoy son otros, pero siguen siéndolo. Una ideología, una economía. O el todo revuelto.
La Asociación Internacional de Radiodifusión, integrada por directivos y periodistas de radio de todo el mundo, ha dado en la diana al otorgar el Premio a Mario Vargas Llosa. Se adelantaron al Nobel de Literatura pero completaron la realidad de este “cartógrafo del Poder”, como lo definió la Academia sueca y recordaron ayer en San Fernando. El escritor Vargas Llosa no se puede separar del hombre comprometido con la libertad de todos que es el peruano nacionalizado español Vargas Llosa. El mensaje al mundo ha querido decirlo en San Fernando, Cádiz, 200 años después.
Mirándolo bien, que dice la Andalucía sabia, si está el mar de una bahía perfecta, y en su derredor queda un bosque, después de la insania del español machadiano, que incendia los pinares, y a ese bosque se llega en tres padres nuestros y dos avemarías, ¿a quién damos gracias?
Es Puerto Real, fundación de los reyes de Castilla y de Aragón, don Fernando y doña Isabel, llamados los Reyes Católicos. Con el fundo trazaron una muy generosa linde de propiedad. Digo que donde no está el mar de la Bahía de los Mitos está la tierra de este Concejo multisecular, con su caserío blanco, sus diques, las grúas pórticos, las calles trazadas a cordel y el milagro de sus Canteras, el bosque domesticado y bosque, con sus altos pinos que trenzan el árbol de la maravilla de la mirada. Forma parte de los sitios que amo, de los lugares mágicos. Es el pinar hermano del pinar que tenía en los ojos Rafael Alberti cuando llegó a Madrid con una infinita nostalgia del mar.
Las fotos son mirar y hacer un clic, es lo que hice esa tarde inolvidable por los carrizos de arena entre las retamas, el matorral y los troncos de los pinos.
Suspiro ahora recordando el paseo de la mano con mi Claudia...
Se trata de mirar para arriba y ser como el cirujano que abre con el bisturí sin pensar que tras la piel y el hueso anida un alma. Por eso mejor no pensar, mirar y clic, mirar y clic. Para este día, esta noche, en que uno hace partícipe de la maravilla de un pinar y un cielo al mundo entero.
Esta imagen da el trenzado que, alguien dijo hace más de mil años, era España, en donde una ardilla podía ir de Gades a Donosti saltando por las ramas de los árboles. Soñar no cuesta nada. Soñar con ser ardilla saltarina, juguetona, pacífica con sus nueces y su mirar nervioso al depredador asignado...
Fui invitado a la entrega de las Medallas al Mérito a las Bellas Artes por la Ministra de Cultura. Los Príncipes de Asturias presidirían la ceremonia. En Jerez, en la Atalaya. Jerez es una ciudad magnífica, muy bella. A mi me encanta. Tengo allí buenos amigos, amigos fieles. Como Paco Cepero, el genial guitarrista. Como Pepe Contreras, uno de los mejores periodistas que yo conozco y, por supuesto, de los primeros periodistas blogueros gaditanos. Nada más llegar a La Atalaya, los vi. Nos hicieron esta foto los amigos de La Voz, la pongo aquí.
Fue una ceremonia magnífica en la que no olvidaré el discurso de la Ministra de Cultura, realmente bueno, y el parlamento de Tricicle, los geniales cómicos catalanes, galardonados con la Medalla al Mérito a las Bellas Artes concedidas por Su Majestad El Rey. Ya son Excelentísimos Señores Cómicos.
No sabía que Maricha Espejo le había presentado la dimisión a De Bernardo cuando estalló el escándalo que tiene a esta ciudad aturdida y crispada. Ni tampoco, claro está, que el alcalde la convenció para que retirara la dimisión y siguiera esta larga agonía que va a terminar en mayo. Ni siquiera esto se ha dicho, que sepamos. La tenacidad, la terquedad de este hombre puede que hunda a su partido en La Isla para mucho cuando tuvo la oportunidad de oro: aceptar la dimisión de Maricha y preparar la llegada a la Alcaldía de Franjo Romero, por ejemplo. Romero podría haber hecho, en inteligencia con el Partido Popular, lo necesario para depurar las responsabilidades, también las administrativas. Y llegar a las elecciones de 2011en las condiciones mejores posibles para seguir teniendo una activa presencia política.
Entre que ha querido ser el alcalde de la foto del Bicentenario y esta cosa autodefensiva en que se ha convertido, con más que notable pérdida de la realidad, como la contratación de un informe que diga que lo blanco es negro, o al revés, pagándolo (60.000 euros) con dinero del contribuyente, Manuel de Bernardo está hundiendo más si cabe su Alcaldía del Bicentenario. Resaltar el hecho de una minoría exaltada, que siempre la hay, que injustamente lo insulta en los foros y en algunos mentideros, es no ver el malestar profundo que hay en la ciudad con el robo y la gestión del robo, una vez descubierto, cuando, como ha dicho Maricha, "el cielo se les vino encima".
Me habría gustado mucho que la todavía responsable de la Hacienda municipal hubiera dicho in extenso el argumentario con que la convence De Bernardo, y las razones por las cuales ella presentó su dimisión. El contraste de ambas posturas aportaría una información más que interesante de lo que se coció en esos días tremendos en los que un alcalde, una responsable de Hacienda y un partido en el poder descubren que habían estado siendo robados, presumiblemente por funcionarios municipales, en sus narices, durante años, sin que se hubieran dado cuenta. Increíble, increíble.
Para autodefenderse ha tirado un adoquín a la cristalera de la Cámara de Cuentas. Digo "cristalera" como metáfora de la transparencia y eficiencia de una institución pública que ha sido creada para defender el dinero que los ciudadanos entregamos a los poderes públicos para financiar las políticas públicas. Sembrando sospechas de que este organismo está peligrosamente politizado por el Partido Socialista, quita más aire si cabe a la atmósfera angustiosa de la ciudad. Ahora sólo falta que dirija sus dardos hacia los Juzgados de la plaza de San José, haciéndolos responsables de la lentitud e inoperancia de una Justicia ya con el sambenito que le puso su otrora compañero andalucista Pedro Pacheco, que tanta fortuna ha hecho. Como lo único que valía, la aceptación de responsabilidades políticas, era innegociable, la triple estrategia se puso en marcha: descalificación de la Cámara de Cuentas, críticas a la lentitud de la Justicia (llegarán) y, finalmente, el interventor y la tesorera (tiempo al tiempo).
Busqué la partitura del Confutatio, en recuerdo de una de las mejores escenas de la historia del cine, con Mozart en su lecho de muerte dictando a Salieri la orquestación de esa parte de su Requiem. Me he decidido por el Rex tremendae de este Requiem que Wolfgan Amadeus Mozart no pudo estrenar en vida, ni siquiera pudo darle fin a la partitura.
Mozart es uno de los músicos imprescindibles, es la sorpresa continua, la inspiración que habitó entre nosotros.
Visto lo visto, las causas que no son populares se pierden. Vox populi, decimos como expresión probatoria. Los "ataques" (me da risa, la verdad) a la eñe han puesto a cavilar a los Mojinos, lo cual que me parece sorprendente, y lógico. La eñe como seña de identidad.
De ahí, digo yo, los ataques. Se ataca lo que duele. Y los suicidas matan lo más suyo, el sí mismo.
... Con ustedes, señoras y señores, ¡Los Mojinos Escozíos!