jueves, 14 de agosto de 2014

LIBRES E IGUALES EN EL ORATORIO DE SAN FELIPE NERI


El Pinsapar / LA GRAN PATRAÑA


_______ La gran patraña

Es de novela. Ni buena ni mala. De novela. El dechado de virtud que cae convertido en depósito de vicio, la generosidad que era codicia, la moral que era cochambre. Qué esfuerzo vivir así años y años. Y ahora esto. Ocurre cuando uno se adentra en los Archivos de Protocolo, escudriña las vidas de los otros en la escritura de los notarios, cuyo secreto dura un siglo. Yo miré un tiempo esos protocolos, los que podía, más de cien años atrás, no antes, y vi negreros que pasaron a la historia como figuras venerables. Negreros. Ni sus familias lo sabían, digo sus herederos siglo y algo después. Pero esto entra en el ámbito de lo privado. El que extorsiona a sus vecinos o los exprime sobre la base del poder político o económico, explotando la debilidad esencial, la incultura o la extrema necesidad para imponer las condiciones leoninas, draconianas, puede salir impune. Si bordea la Ley. El problema siempre está cuando todo lo que amasas o perpetras está definitivamente fuera de la Ley. Porque es responsabilidad del Estado perseguir el delito, el crimen. Y en el caso de los Pujol nunca acababa de encontrar el momento oportuno. Alguien salía de la Fiscalía por una ventana, alguien mandaba parar. Era parte del argumento de la novela, buena o mala.

Estoy diciendo, ¿construían una estatua para que se deshiciera en el momento oportuno? Busco a mil por hora una línea argumental a este guión repugnante, a esta comparación conmigo, con usted, con todos los que hemos pagado impuestos, todos los impuestos. Y nunca tuvimos ni la idea de poner un poquito en Gibraltar, por ejemplo. O en Andorra. La herencia que no tuvimos, o el dinero limpio que reunimos con mil sacrificios para la Universidad de nuestros hijos. Sí, era verdad, el mundo se divide en los tontos y los listos y los tontos trabajamos para los listos. A la vista está. Pero el Estado no es usted ni yo, el Estado debería ser siempre esa maquinaria que nos dicen, que nos protege y hace imposible que los Pujol hayan amasado una fortuna que -dicen- puede alcanzar los 1.800 millones de euros. O aunque sean menos. Y tenerlos dando saltos por los paraísos fiscales que nunca entenderé por qué los permiten, nunca. La gran patraña de esta confesión al pie de la sepultura me ha enfurecido contra el Estado, el Estado que no descubrió nada o miró para otro sitio. Por la suprema Ley, que dicen.

Es que todo ese dinero eran más escuelas y hospitales, más ayuda a la Dependencia, más Constitución. Y no esta codicia atroz, esta horripilación.

Diario de Cádiz
El Pinsapar
2014 08 14_

domingo, 10 de agosto de 2014

Calle Real / ASUNTOS PENDIENTES


_______ Asuntos pendientes

Pienso en los cuarteles generales del PSOE, IU, UPyD, Ciudadanos, incluso en el del PA, que aunque está en el Gobierno recoge basuras en las playas para dar ejemplo cívico y mostrar que la limpieza de playas no tiene nada que ver con la Delegación que ostenta; en todo el espectro en general, clavados con un alfiler en un corcho para que no se olvide ni un solo día, hay un elenco de asuntos pendientes de la ciudad sobre los que pedir cuentas al gobierno de José Loaiza. Del mismo modo, pienso yo, que en el cuartel general del PP isleño hay otro corcho con nombres pinchados con alfileres de los asuntos pendientes que dependen de la Junta de Andalucía, gobernada por otros partidos.

Quizá sea mi afición a algunas series de TV en donde veo los paneles con fotos y documentos ordenadas para seguir un orden en las investigaciones y no haya esos paneles, esos corchos con alfileres y prioridades, todo sea al modo hispánico de la improvisación. Quiero decir que si lo hubiera y tuviéramos accesos a todos, quizá nos dieran la radiografía cabal de quienes nos gobiernan o puede que nos gobiernen un día, esto es, la radiografía estimativa más exacta de nuestras deficiencias, retrasos, incumplimientos y negligencias.

Pienso ahora en los nuevos Juzgados, toda vez que tras las denuncias de CC.OO y el Colegio de Abogados, más la inspección de trabajo, la Junta anunció a bombo y platillo la adjudicación por concurso de una finca que reuniría las condiciones temporales e idóneas para la Administración de Justicia en San Fernando. Pues nada, si de lo que se trataba era de ganar tiempo, se ha ganado. Porque quedó desierto el Concurso y ahora se va al nuevo mecanismo previsto en la Ley para estos supuestos. O sea más dilaciones. El tranvía, continuando con esta relación parcial, forma parte de un imaginario de la desesperación. Ni el Diez, ni el Doce… Ni el Catorce. Ni se sabe cuándo. Los ciudadanos ven cómo se deteriora el pavimento de la calle Real, tras tanto sufrimiento del comercio, y no hay tranvía ni arreglo definitivo. Es como el Hospital Naval. Se ha solucionado el asunto del personal pero no conocemos la política de inversiones ni los servicios que se van a ofertar a los vecinos. El edificio del Ayuntamiento, tras ocho años cerrado, ahora parece que por fin se hará alguna actuación menor. Del inicio de las obras para su rehabilitación y puesta en funcionamiento, nada se sabe. Es como el lugar a donde definitivamente vaya el Archivo Municipal y la Biblioteca Lobo. Se habla, con verosimilitud, pero tampoco hay plazos, compromisos, fechas. ¿Solar de la antigua Fábrica de San Carlos? Ni idea. ¿Dragado de la Casería para su Club Náutico? No lo sé, ¿lo sabe usted? Las butacas de la sala grande del Centro de Congresos…

¿Para la eternidad ese tormento de lo mal hecho, lo incomprensiblemente mal hecho? Esto por no recordar temas especialmente hirientes, que si se recuerdan parece como si el que lo hace sea responsable de algo y mereciera la ira de alguna alta funcionaria. Vamos, aquí hay que estar callados y votar cuando te llamen. O no. ¿Asuntos pendientes? Ya digo, ojalá se pusieran todos en una relación. Y los publicara nuestro Diario.

Diario de Cádiz
El Pinsapar
2014 08 10_